A mí me pasaba lo mismo mientras fui vendedor, y luego gerente. Y ahora, que desde hace muchos años sigo en el mundo de las ventas y desarrollo de negocios como entrenador y asesor empresarial, sigo en contacto con cientos de clientes (empresarios, profesionales, comerciantes, gerentes, vendedores, y emprendedores) quienes me comentaron muchas veces que les pasaba lo mismo que a usted.
A mí me contratan empresas de distintos países (Argentina, Chile, Ecuador, Perú, Guatemala, Costa Rica, México, Estados Unidos, Paraguay, Uruguay, España, Panamá, Nicaragua, República Dominicana), para que vaya a capacitar a su personal en técnicas de ventas, tácticas de influencia y persuasión, y negociación comercial.
Si bien lo que uno puede hacer participando personalmente durante un taller de entrenamiento es una experiencia de aprendizaje incomparable, no todas las empresas de nuestra región disponen de los $2.500 dólares USD que cobro de honorarios por cada día de trabajo, más los gastos de pasajes de avión, hoteles, etc.
Ni tampoco todas las personas interesadas en participar de mis seminarios abiertos, disponen de los U$150 a U$300 que los organizadores cobran para la inscripción en actividades de un día.
Pero más allá de la inversión necesaria para compartir conmigo un día inolvidable de entrenamiento y motivación, lo que se hace verdaderamente difícil es la CONTINUIDAD.
Voy a ser claro con esto: por supuesto que lo fundamental, el comienzo de todo es que la información a la que usted acceda sea práctica, efectiva, innovadora, y que produzca resultados comprobados por innumerables casos de aplicaciones en casos reales exitosos de personas como usted, pero no alcanza con eso:
a) Si usted aprende hoy algo nuevo, pero no lo pone en práctica, ese conocimiento es inútil.
b) Si usted no está en entrenamiento permanente, lo van a pasar por arriba.
Queremos información privilegiada, entrenamiento empresarial de alta competencia, y continuidad para asegurarnos una capacitación y motivación permanentes.
Recordemos los obstáculos que nos impedían acceder a todo esto:
Falta de tiempo, falta de dinero, falta de un filtro que sólo deje llegar a nosotros los conocimientos positivos relevantes para nuestro éxito comercial, falta de logística para organizar reuniones de personal, falta de entrenadores con experiencia en el mundo real de los negocios, falta de aplicabilidad de las técnicas, falta de continuidad…